Durante el mes de junio han tenido lugar las convivencias de Postcomunión. Ángela Peral ha participado en la última, con otros jóvenes de Postco 3 y Postco 3 (1º y 2º de la ESO). Para ella esta experiencia supone el adiós a la Postcomunión, por lo que la convivencia ha adquirido un matiz diferente a las otras.

Cerramos esta etapa, con ilusión, alegría  y ganas de empezar otra nueva. Me acuerdo cuando estábamos en  5º  de primaria y de lo que mas ganas tenia era de empezar postcomunión aunque para nosotros siempre fue catequesis de mayores. Tuve la suerte de tener desde el primer momento un gran grupo y buenos catequistas  y gracias a Dios  he tenido esa suerte durante los cuatro años.

De esta gran etapa me quedo con las reflexiones , con los momentos en los que sales de cada sesión y cambia tu forma de pensar  y mentalidad pero sobretodo me quedo con la sensación de haberme  acercado mas a Dios.

No me puedo olvidar de unas de las cosas mas importantes , divertidas y esperadas de los niños que formamos este grupo , las convivencias, con las que tanta impaciencia queremos que llegue el momento de despedirnos de nuestros padres y montarnos en el autobús pera ir a Jerez o Mazagón sin saber lo que te puedes encontrar y preguntándote miles de cosas a ti mismo, aunque por experiencia siempre hay gente maravillosa , a lo mejor cuando llegas ves las cosas de una manera  y al cabo de conocernos un poco y convivir juntos cambiamos radicalmente de opinión, y al fin y al cabo somos todos diferentes pero como dijo un catequista de San Fernando en esta última convivencia lo que nos une es que estamos todos locos de la cabeza por Dios y con que solo nos una eso es suficiente para llevarnos , salir de allí con amigos y con ganas de volver a vernos.

Me voy a centrar en esta ultima convivencia de postcomunión para mí y la verdad que tengo una gran suerte porque he conocido a mucha gente , he reflexionado y me he conocido a mi misma un poco más , los catequistas a los que solo les podemos  agradecer lo bien que hacen todo, han preparado millones de cosas y lo mejor es que notamos que lo hacen con esfuerzo, ganas y cariño.

Para mi ha sido una etapa genial , diferente, con sus mas y sus menos pero inigualable , cada vez tengo más claro que Dios es imprescindible en mi vida y esto gracias a postcomunión ya que al ser un poco mas mayores y tener a los catequistas como ejemplo no podía ser menos.

Ahora me toca otra nueva etapa y aquí estoy con ganas empezarla , seguir conociéndome y conociendo a gente loca de la cabeza por Dios.

Ángela Peral, Parroquia Sagrados Corazones (Sevilla)